“Toda problema, tiene solución y toda
enfermedad tiene curación”. Mmm no. Las cosas no son así. Si las cosas fuesen
así, tal vez el mundo fuese distinto.
Debido a esto, decidí estudiar una de las profesiones más bonitas,
nobles, honestas, humanas, reconfortantes, esperanzadoras y caritativas del
mundo…la de colector de autobús.
Me puse a hacer una investigación
exhaustiva y busqué, averigüé, pregunté, indagué, analicé, consideré, ¡en fin!
Pregunté bastante y encontré que para semejante oficio…no se estudia. Cuando le
pregunté a un colector, que me vio sonreír y asombrarme, ante la noticia de que
no amerita estudio ni pruebas, me dijo:
-¡Aaahhhh güeno menor. Tienes madera
pa’ colector!- a lo que mi pensamiento mediocre le alegró, esperanzado. Ahí
mismo, él retomó la palabra…
-Eso sí, chamo. Tienes que cumplir
ciertos requisitos pa’ trabaja’ aquí.
- ¡Ah vaina! ¿Y no me acabas de decir,
que no se necesita prueba ni nada pa’ ser como tú?
- ¿Yo dije eso? ¡Mielde! Bueno, pero
en fin, lo cortés no quita lo valiente.
- A ver, ilumíname, cabeza ‘e mordisco
‘e rata.
-Eso. Así se comienza, insultando.
Pero respeta, que hoy yo soy tu profesol. Vacílate el beta. Lo primero, es
saber que el cliente no tiene la razón. La tienes tú. Segundo, estudiante no es
gente. Nada de carnet ni ticket, que eso “no ’tá en gaceta’”. ¡Y bórralo!
Telcero, nada de telcera edad. Pasaje completo y mande botín.
-¿Mande botín?
- Mande botín. Bueno, que te dé los
reales, pa’ coroná’ ese billete, relaja’o.
¿Y si no? Bota’o en la parada pa’ que sean serio y rescaten, bórralo.
- ¿Pa’ que rescaten?
- Bueno, nada. Pa’ que obtengan lo que
merecen, por brujas. Pa’ que agarren ahí ¿tú me entiende’?
-¡Aaahhhh! Sí, claro. Entiendo.
-¿De bien?
- De bien, ‘mano.
-Listo. Lo próximo en el beta o lo
siguiente; lo “next” ¿tú me
entiende’? es la música, menor. Salsa baúl, tranca’o[1]. Salsa romántica,
tranca’o. Salsa cabilla, tranca’o. Salsa erótica, tranca’o. Salsa brava,
tranca’o.
Reggaetón, de las viejitas de antes, tranca’o. Vallenato, convive, en
todas sus formas y manifestaciones, tranca’o. ¡Ah! Y el loco de Aventura, que sabe su vaina. De bien.
Cualquier cosa, cuádrate un MP3 y mezcla toda esa shit.
-
¿Shit?
- ¡Yes!
Estoy haciendo un cursito de inglés, on-line.
Y no puedes colocar groserías aquí Reinaldo, rescata.
- ¡Ah dale. Sí va, ‘mano!
-Eso. Ten en cuenta que siempre hay
que tené’ sencillo en el bolsillo. Que si pa’l agua, que si pa’l café que si
pa’ los caramelos de jengibre. ¡Aaaahhhh güeno, rescata! Eso sí. Al lado del
chofer, eso es sagrado. Centro de operaciones. Ca-ca. Eso no se toca.
- Me estás hablando del radio ¿no?
-¡Qué radio nada, vale! El mueble. El
aposento. Pa’ que se sienten las princesas. Las reinas. Las fresas. Tú sabe’.
Mami que se monte, mami que va pa’l mueble. Y si es feita, pasillo y bórralo.
- ¿Y mande botín?
- ¡Aaaaahhh güeno! Ya estás agarrando
el Ilan Chester, menol. Vacila el
beta. Hay un librito sagrado que es nuestro, que trata sobre física cuántica.
Eso no lo sabe nadie. Eso es lo que leemos los colectores, Cayetano. Bien
callaíto, pa’ entender como acomodar a la gente. ¿’Tamos claro? Tienes que ‘tá
claro que la gente es burda de obtusa. Por eso toca aplicarles el reforzamiento
de Ivan Pavlov.
-¿Ese fue el que peleó con Rocky?
-¡Concéntrate, vale! Aquí es donde le
pones apodos a la gente, pa’ que se acomoden en el pasillo. “Epa, mi doña”,
“hermanito” “Mami” “Papi”, “’mano”, “princesa” “patrón” , “reina” o cualquier
otra cosa, con el respectivo “tenemos espacio ahí”. Es como jugar tetris con la gente. Y bueno, nada. “Por
favor” pa’ to’ el mundo. Mantén claro que todo gira, en torno al centro del
pasillo. Si están por atrás, mándalos pa’l
centro. Si están por adelante, mándalos pa’l centro. Bórralo.
- La cosa no es tan mantequilla. ¡Qué
beta! ¿Y hay que tener un pañito, supongo? ¿Pa’ la calor?
-Ah
no, claro. ¿Y cómo es, pues? ¿Tú crees que es una jugadera to’ el día en la
calle o qué? Y eso que no te he hablado de sacar cuentas, mientras vas manda’o
por la autopista. Tanto que odié la matemática hasta el tercer grado, que dejé
los estudios, pa veni’ a usa’la to’ los días. Pero háblame, entonces. ¿Cuándo
comienzas?
- Nada, vale. Era pa ve’ qué
lo qué. Pa ve’ cómo funciona el sistema que tal, ya que en una semana me
gradúo de la universidad. Gracias por la clase magistral. Rescata.